Tarta GUINNESS, a mi manera

Una de las primeras recetas que hice al comenzar a escribir el blog fue esta, y no me quedó del todo bien. El frosting estaba demasiado líquido, el bizcocho con demasiado sabor a vainilla….

El caso es que cuando mi hermana Victoria me dijo que le hiciese la tarta para su cumpleaños, la primera que se me ocurrió fue ésta, tenía que quitarme la espinita, y me alegro MUCHÍSIMO de haberla hecho. Quedó impresionante. El sabor, la textura del bizcocho, la cremosidad…..y el frosting de queso hecho con nata vegetal resultó tan sólido y compacto que habría podido hacer la decoración que me hubiese apetecido.

Que chula!!!!! Y que riquísssiiiiimaaaa!!!

Os pongo la receta:

Ingredientes

375 ml Cerveza Negra Ginness

375 gm Mantequilla

120 gm cacao sin azúcar

600 gm azúcar moscovado (si no tenéis podéis utilizar azúcar moreno)

210 ml nata líquida con 35% MG

3 huevos

1 tbs vainilla líquida

375 gm harina todo uso

3 cucharaditas de bicarbonato sódico

Procedimiento

Ponemos en un cazo la cerveza a fuego flojo, y cuando esté caliente (sin hervir), añadimos la mantequilla en cubos y movemos hasta que se disuelva.

Apartamos del fuego y reservamos.

En otro bol, tamizamos la harina, el bicarbonato y el cacao, una vez tamizado todo añadimos el azúcar y mezclamos todo bien.

En otro bol, ponemos la nata, los huevos y la vainilla. Mezclamos con una varilla manual hasta conseguir una masa uniforme. Añadimos la cerveza con mantequilla y mezclamos otra vez hasta tener una sola masa.

Una vez terminada la mezcla de húmedos, la vamos añadiendo a los secos poco a poco mientras que batimos con las varillas eléctricas. Hay que conseguir una masa sin grumos, queda muy líquido, pero no os preocupéis es así.

Echamos la masa en nuestro molde enmantequillado y forrado con papel de horno (en mi caso un molde de 20 cm y otro de 15 cm) y al horno precalentado a 180º hasta que el palillo salga seco.

Cuando lo tenía en el horno un buen rato, comencé  a oler a quemado así que comprobé y vi que por el centro todavía estaba crudo, así que lo tapé con papel de aluminio y lo dejé otro buen rato.

El segundo bizcocho lo metí directamente tapado y no se me quemó.

Para el frosting:

400 gm queso fresco Hacendado

100 gm Icing sugar

700 ml nata vegetal Ambiante (ya está azucarada)

Batimos con las varillas eléctricas el queso con el azúcar hasta que quede bien integrado. Veréis que queda súper líquido, no os preocupéis, metedlo al frigo y mientras montamos la nata.

En un bol grande, echamos la nata, tenéis que tener en cuenta que triplica su volumen, así que el bol grande de verdad.

Batimos y batimos con las varillas, cuanto más batimos, más sólida se pone.

Cuando consideremos que tiene la solidez que nos gusta, sin dejar de batir, vamos añadiendo el queso, y dale que te pego con las varillas hasta integrarlo todo perfectamente. Y ya tenéis un frosting perfecto para relleno y para cobertura. No me canso de deciros lo que me gusta esta nata tan versátil.

…y a montar la tarta, por cierto mi primera tarta de dos pisos, con mucha paciencia y tranquilidad. 

Por cierto la flor de arriba la hice con una boquilla que compré para hacer churros y a la cual no le había dado salida nunca, al final va a servir para algo ;)

Como me sobró masa, hice una docena de cupcakes en mi máquina estupendísima y los adorné con crema de stracciatella (la tenía congelada) que me sobró de la de la entrada anterior. Inmediatamente, los metí en una caja y los repartí, con el consiguiente mosqueo de mi ratona, que me decía: mami, esos que me gustan no los regales….

Pero es que ella se come uno y yo me como once….:(

Bueno, espero que os guste mi súper tarta Guinness, de dos pisos!!!!!

Un beso a tod@s

Estoy enlazando esta entrada a la Fiesta de Enlaces de Personalización de Blogs de Blanca ;)