Anoche, después de un montón de tiempo sin hornear nada, me apeteció hacer algo para aprovechar una calabaza que había asado a medio día.
Me puse a pensar y me acordé de unos almendrados que hice hace un montón de tiempo y que salieron súper ricos, no se por qué no los he repetido nunca.
Y dicho y hecho, tuve que ir a mi propio blog para buscar la receta, pero al final, cambié un montón de cosas, así que la vuelvo a poner.
INGREDIENTES
2 huevos
½ sobre levadura
Opcional: 1 pizca canela molida, 1 pizca nuez moscada molida
PROCEDIMIENTO
Lo primero de todo, trituramos la pulpa de la calabaza junto a la mantequilla y reservamos.
En otro bol, batimos con las varillas los huevos y el azúcar hasta que tripliquen su tamaño. Le añadimos el puré de calabaza, mezclamos, la Maizena junto a la levadura, mezclamos y por último la calabaza y seguimos mezclando.
Por supuesto, ya teníamos el horno calentando, al tope, y cuando introducimos los moldes de las magdalenas con sus papelitos lo bajamos a 180º SOLO POR ABAJO, durante 15 ó 20 minutos. Cuando veamos que la masa empieza a subir, lo ponemos a 160º arriba y abajo, y no nos despegamos del horno puesto que esta masa se quema muy fácilmente.
La intuición te dirá cuando crees que está hecho, y entonces nos aseguramos con un palillo.
Sacamos del horno y ponemos a enfriar.
Sospecho que voy a hacer muchas cosas con calabaza, por que me quedan un millón de ellas de las del tejado de mi suegro jajajajajajaja!!
Me habría encantado tener una buena cámara de fotos para hacer una de cerca, cerca y que pudieseis apreciar la textura, es increíblemente melosa y jugosa.
Puf, se me hace la boca agua sólo de pensar en ellas.
Espero que os gusten y muchos besos a tod@s!
Te han quedado muy bonitos y seguro están riquísimos, guardo la receta para hacerla en versión solar que seguro queda muy bien
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